Cuando la humedad ha entrado a nuestro hogar, es bastante difícil detenerla si no lo hacemos a tiempo. Y claro, en estos casos, los sprays clásicos solo ocultarán el olor, pero no van a quitarte las alergias, tampoco a mejorar la calidad del aire, y mucho menos a evitarte una posible enfermedad. En este artículo, te contamos la manera correcta de quitar el olor a humedad, bien sea en toda la casa, en un mueble, en libros o toallas ¡Vamos allá!
Cómo quitar el olor a humedad del hogar
Si el hogar completo ha absorbido ese feo olor a humedad, todo pinta bastante bien. Para este punto, es probable que cuentes con moho, y que tus paredes, techo o suelos tengan un verde negruzco. Caso contrario, también podría ser que uno de los muebles del hogar se encuentre en una condición tan dañada, que esté regando todo el olor a la habitación.
Sin importar cuál de los casos es el tuyo, lo primero es identificar la fuente de la humedad.
Una vez descartados los muebles, es hora de comprobar paredes aledañas a tuberías. Éstas, generalmente suelen ser la fuente en casas viejas, o con una construcción que nunca ha sido reparada.
Una vez comprobada la fuente, tendrás que solicitar ayuda a un profesional (a menos que seas un manitas) para que repare la fuente de la humedad. Si no curamos esa gotera o filtración ¡No estamos haciendo nada!
Luego de esto, tenemos dos opciones. Puedes usar carbón activado en zonas aledañas a la humedad. Este es muy barato, y combate muy bien los olores. Si no tienes dinero, también puedes aplicar bicarbonato de sodio en la zona húmeda, y esto irá neutralizando los olores. No te preocupes por la pared, ya que el bicarbonato no mancha.
Cómo quitar el olor a humedad en los muebles
Vayamos al caso B. Digamos que en tu habitación, o en la sala tienes un mueble que se ha humedecido muchísimo. Ha obtenido un terrible olor a moho. ¿Lo tiramos? Pues, claro que no, hombre. Es bastante simple.
Digamos que se trata de un mueble de madera pura, como un armario, por ejemplo. Siendo este el caso, y de los más comunes, es bastante complejo, ya que dependiendo del tipo de madera, puede que la humedad haya penetrado muy profundo.
Por esta razón, lo primero que haremos será utilizar un cepillo con un poco de bicarbonato de sodio, y limpiar toda la superficie del mueblo. Enjuagamos con un paño húmedo con agua limpia, y luego lo dejamos llevar sol hasta que se seque por completo. Con estos pasos, deberíamos lidiar con el problema.
Si se trata de un mueble con superficie acolchada o un colchón
Cuando se trata de un colchón o quitar la humedad a un mueble con acolchados como un sofá, la cosa se complica un poco. En este caso, usaremos agua oxigenada con ayuda de un pulverizador, y si contamos con una aspiradora, nos ayudaremos para secar lo más posible e ir oxigenando el sofá o colchón.
Una vez culmines el proceso, tendrás que dejarlo llevar sol al aire libre por mucho tiempo. En caso de tratarse de un colchón muy grueso, puede que tengas que voltearlo para que seque del todo.
